Cocina a gas o eléctrica: ¿cuál es la mejor?
Dependiendo en muchos casos de lo que se haya conocido en la casa familiar, de cada una podemos encontrar defensores y detractores, argumentando incluso el diferente sabor. Al margen de esto último, que es sumamente subjetivo, sí que hay otras variables que valorar a la hora de encontrar respuesta.
¿Cocina a gas o cocina eléctrica?
Que sea mejor una u otra dependerá de las circunstancias.
1. El precio
El precio de la electricidad no es igual en islas como Irlanda o Reino Unido que en otros países como Francia. Es posible incluso que el gobierno promuevas ayudas subsidiaras al sector del gas, como hace unos años sucedía en Ecuador, por lo que el precio será más asequible que la electricidad.
2. El uso
Aunque a priori lo del «diferente sabor» puede parecer una tontería, sí que es cierto que los cocineros suelen preferir la cocina a gas porque tienen más control sobre la temperatura, pudiendo hacer cambios bruscos de la misma cuando la elaboración lo requiere así. El gas lo permite mejor incluso que las modernas cocinas de inducción, que no obstante han supuesto un importante avance.
El uso será una variable para quien use la cocina de manera profesional o sea un amante de las nuevas recetas, pero si para ti la cocina es mera subsistencia, valorar solo el uso puede que no te ayude a decantarte.
3. La limpieza y la seguridad
Por lo liso de la superficie y por el material, está claro que es más fácil limpiar las cocinas eléctricas que las que son a gas. Éstas últimas, además, entrañan más peligro que las anteriores a la hora de quedarse abiertas accidentalmente.
4. El respeto al medio ambiente
Las cocinas a gas son más contaminantes, puesto que emiten dióxido de nitrógeno en el hogar y acumulan más CO2.
Está claro, visto lo visto, que la elección por una u otra dependerá de las prioridades de la persona o personas que de ella harán uso.
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Cocina a gas o eléctrica: ¿cuál es la mejor?