La cocina es mucho más que un espacio destinado únicamente a la preparación de alimentos; es el corazón del hogar, un lugar de encuentro familiar y un espacio donde la creatividad culinaria cobra vida. En este entorno dinámico, las plantas desempeñan un papel multifacético, ofreciendo una serie de beneficios que van más allá de la estética. Al introducir plantas en la cocina, no solo agregamos un toque de frescura y vitalidad, sino que también aprovechamos sus cualidades aromáticas, culinarias y terapéuticas. Desde el colorido esplendor de las flores hasta las fragantes hierbas aromáticas, las plantas en la cocina no solo enriquecen nuestros platos, sino que también mejoran nuestro bienestar general y crean un ambiente acogedor que nos invita a explorar y disfrutar de la experiencia culinaria de manera más plena. En esta exploración, descubriremos cómo las plantas pueden elevar la cocina a un nivel completamente nuevo, ofreciendo un verdadero festín para nuestros sentidos y nutriendo nuestro cuerpo y alma.
Tener plantas en la cocina es beneficioso por varias razones:
Mejoran el ambiente: La cocina no solo es un lugar para cocinar, sino también un espacio de convivencia. Las plantas aportan color y alegría, sin importar el estilo de decoración que tengas.
Hierbas frescas al alcance: Las hierbas aromáticas crecen bien en macetas y proporcionan ingredientes frescos para condimentar tus platos. Puedes tener albahaca para el pesto, romero para el pollo o orégano para pizzas al alcance de tu mano.
Selección de hierbas aromáticas: Opta por hierbas de crecimiento rápido y tamaño reducido, como mejorana, estragón y salvia, que además lucen hermosas juntas.
Beneficios para la salud: Algunas plantas, como el aloe vera, son útiles para tratar quemaduras. La estevia te permite satisfacer antojos de dulce de forma saludable, y la menta es ideal para preparar infusiones digestivas.
Resistencia y decoración: En la cocina, es esencial elegir plantas que toleren los cambios de temperatura. Los ejemplos incluyen el jazmín de Madagascar y la sansevieria cylindrica. Las suculentas, cactus y illandsias son opciones resistentes y decorativas.
Purificación del aire: Las plantas ayudan a eliminar toxinas y purificar el aire en la cocina, reduciendo la presencia de detergentes, humos, grasas y productos de limpieza. Además, proporciona oxígeno de calidad para un ambiente más saludable.
¿QUÉ PLANTAS SON ADECUADAS PARA LA COCINA?
Incorporar plantas aromáticas y comestibles en tu cocina es una excelente manera de tener ingredientes frescos a tu alcance para dar sabor a tus platos. Además de su funcionalidad, estas plantas también aportan un toque decorativo y fresco a su entorno culinario. Imagina convertir tus ensaladas en un estallido de color con flores de caléndula, capuchinas o hibisco. Sin embargo, estas plantas requieren una buena cantidad de luz para prosperar. Te presentaremos las hierbas aromáticas imprescindibles que deberías considerar tener en tu cocina:
- Caléndula
- Perejil
- Menta
- Salvia
- Romero
- Albahaca
DÓNDE UBICAR LAS PLANTAS EN LA COCINA
- En la ventana: La ventana es el sitio ideal; ya sea en el alféizar o en la repisa interior. Aquí puedes disponer plantas aromáticas, flores y aquellas que requieren una gran cantidad de luz.
- Junto al fregadero: Colocarlas cerca del fregadero añade un toque de color y calidez a una zona que normalmente resulta poco atractiva.
- Colgadas de una barra metálica, al igual que los utensilios: Utiliza abrazaderas para cada maceta y cuélgalas con ganchos. También es una opción ponerlas en cestas colgantes.
- Asígneles un estante propio: Puedes destinar un estante exclusivo para tus plantas, incluso ubicarlo cerca del techo, creando una hilera completa de verdor.
- En cajas de té o en una bandeja: Agrupa pequeñas macetas, como las aromáticas, suculentas o cactus, en cajas de té o en una bandeja para una presentación atractiva.
- En una pared estrecha: Si cuentas con espacio limitado, pinta una pared con pintura de pizarra para hacer anotaciones y coloca ganchos para las macetas.