Si vas a renovar tu cocina, y es posible que tengas ese proyecto entre manos debido al protagonismo que ha ganado esta estancia en los últimos años, estos consejos te resultarán muy útiles.
Te mostramos algunos de los errores más habituales que puedes cometer al renovar tu cocina, no caigas en ellos.
No confiar en los profesionales
Las empresas de reformas e instalación de cocinas son las verdaderas conocedoras de los mejores materiales y los estilos más adaptados para cada espacio. La asesoría profesional es de gran ayuda para distribuir más correctamente los elementos y sacar partido de cada centímetro disponible.
La cocina es mucho más de lo que se ve directamente
Un error que comete mucha gente al renovar la cocina es olvidar los conductos y los sistemas de extracción. Si queremos que esta sea eficiente, los conductos deben ser los más cortos posibles y rectos, para liberar los malos olores en la estancia.
¿Cómo funcionan técnicamente los electrodomésticos?
Los electrodomésticos nos hacen la vida más fácil en la cocina, pero hay que saber distribuirlos bien en el espacio disponible, pues algunos de ellos necesitan ventilación, instalaciones de agua, tomas de luz… Si no tenemos en cuenta estos detalles, la cocina no acabará de ser funcional y el resultado será un mayor consumo de recursos.
Cocinas poco accesibles
Las barreras arquitectónicas son los impedimentos físicos que impiden a personas con movilidad reducida trabajar con comodidad en la cocina o cualquier otro espacio. Si quieres renovar tu cocina, piensa en las necesidades del futuro y en quién va a hacer uso de ella.
Las cocinas integradas, una solución con riesgos
Las cocinas abiertas al salón, tan populares en los últimos años, pueden suponer algún problema con respecto a la zona de aguas, las puertas corredera o escamoteables que separan ambos espacios o la generación de ruidos. Todos esos asuntos hay que planificarlos bien.
Reformar y diseñar la cocina, aspectos diferenciados
Al renovar tu cocina, lo que estás haciendo es dos acciones en una: reformarla y aportarle un nuevo diseño. El orden en el que deben ejecutarse esos trabajos es ese, primero la reforma y posteriormente el diseño. Sin una buena estructura, no habrá diseño ni apartado estético que resulte aprovechable.